Testimonio Refugiadas de Kazajstán Parte I



Una familia refugiada, a quien se le ha negado vivienda y seguridad social se encuentra en nuestro país sin un techo donde dormir. Margarita, la madre-abuela de 72 años ha luchado por todos los medios llegar a las autoridades argentinas. Ha escrito más de 50 cartas a todas las instituciones que conocía: “los refugiados tenemos derecho a escribir”, dice, “pero también tenemos derecho a recibir una respuesta”. Hoy se acercó con su hija a la Fundación Ciudadanos del Mundo para recibir asistencia social y jurídica.

refugiadas politicas

Margarita, una ciudadana refugiada política de Kazajstán, ex URSS, se acercó a nuestra Fundación Ciudadanos del Mundo ésta tarde desesperada en busca de una respuesta. La señora de 72 años llegó a la Argentina con su familia en el año 1997 en busca de un futuro mejor. Huyeron de persecusiones políticas y raciales luego de que su esposo muriera en un accidente.

La familia atravesó momentos muy difíciles ya que Larissa, la hija de Margarita tuvo que ser sometida a una operación neurológica. Además fueron estafados por “supuestos dueños” de la casa donde alquilaban con sus únicos ahorros que traían de su país.

Margarita lleva adelante una ardua lucha por conseguir la protección del gobierno Argentino, el cual, está obligado a brindar vivienda y seguridad social a los refugiados políticos debido a que ha ratificado la CONVENCIÓN SOBRE EL ESTATUTO DE LOS REFUGIADOS.

Ha escrito innumerables cartas a organismos de Naciones Unidas, a la Presidenta Argentina, incluso al mismísimo Secretario de Naciones Unidas, Ban ki-moon pidiendo un refugio, un trabajo, un alimento para poder sobrevivir.

Todos tenemos derecho a recibir el mismo trato, más aún personas que tienen una situación delicada por sufrir de persecuciones y por estar lejos de su patria. Margarita asegura “he escrito muchas cartas a las autoridades del gobierno argentino y de los organismos de Naciones Unidas, sólo quiero una respuesta”.

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